¿Qué es Coaching? Y tú me lo preguntas. ¡Coaching eres Tú!

Me pide mi compañero y amigo Josué Jiménez (www.cherrygredos.com) que escriba sobre Coaching. Y habría tanto que decir… pero me voy a centrar en un aspecto que a mi modo de ver hace único y mágico al Coaching.

Lo primero, he de reconocer mi profunda ignorancia acerca del Coaching hace tiempo, antes de atreverme a convertirme en una profesional en este ámbito… Sí, yo creía que Coaching era una suerte de Entrenador o Consejero cuya misión consistía en facilitar pautas concretas de actuación, aconsejar sobre opciones etc.

El Coaching para mi ha sido una de las serendipias de mi vida… ¡qué hermoso hallazgo! Más allá de ser una técnica o método de consecución de retos, el Coaching supone un viaje al interior de uno mismo y por lo tanto un reencuentro, un reencuentro con nosotros mismos, con nuestro verdadero yo. Ese yo al que debido a los automatismos y dinámicas de esta locura de vida que casi todos llevamos, vamos dejando olvidado en todo o en parte por el camino.

Y así, lo alucinante del Coaching es ir descubriendo que TODO, absolutamente todo lo que necesitamos para conseguir nuestros retos YA está en nosotros, facilitando que todo el esplendoroso y luminoso ser que cada uno de nosotros somos aflore. Por supuesto que es un proceso, por supuesto que a veces se llega antes y otras después pero, ¿no es maravilloso saber que dentro de cada uno de nosotros YA contamos con los recursos, la energía y las capacidades para la consecución de nuestras metas? El Coach acompaña en este descubrimiento, pero el protagonista absoluto de este proceso siempre será el Coachee (o cliente).

No me queda más que animarte a que alguna vez en tu vida experimentes a través de un proceso de Coaching esto que te estoy contando. Por mucho que yo alabe las maravillas de este mundo, no hay por qué creerme. Pero si lo vives, verás que, aunque no es magia porque no hay trucos, los resultados y el impacto en ti, serán más que evidentes.

Querido Josué, espero que te haya gustado. Te lo dedico a ti, no porque me hayas solicitado tú este texto, sino porque sabes perfectamente de lo que hablo.